La fuerza de voluntad es la verdadera fuerza motriz de tu existencia, es ese elemento determinante de coraje que te permite afrontar las dificultades desde una perspectiva amable. Sin embargo, pese a que la voluntad es una capacidad innata en el ser humano, debes entrenarla. Cuando llevas un tiempo dejándote llevar por la pereza, esa corriente de tedio te arrastra en bucle. ¿Cómo entrenar tu fuerza de voluntad en septiembre?

1. Aprovecha los instantes cotidianos para pensar. Por ejemplo, mientras caminas hasta el trabajo, cuando te desplazas en transporte urbano, cuando te relajas durante un baño, al despedir el día con un mensaje de gratitud… Es cierto que la prisa es una ley habitual en la sociedad presente, sin embargo, es recomendable que te bajes de este tren de la prisa.

2. Tener fuerza de voluntad no significa ser una máquina. Por tanto, integra en tu agenda un ocio creativo que es vital para descansar. Los éxitos profesionales son más dulces cuando no sacrificas tu vida personal.

3. Crea un mantra que sea como un amuleto de la suerte para ti, un mensaje que te inspire fuerza, superación y capacidad de cambio. Es mejor que tú crees tu propio mantra ya que al hacerlo con tus propias palabras te resultará más sencillo interiorizarlo. Intenta que este mantra tenga palabras con significado, pero también, con belleza sonora. Es decir, frases bonitas de amor por la vida. 

4. Sin miedo al síndrome postvacacional. ¿Por qué hacer un drama de algo tan natural como la pereza que puede producir del cambio de ritmo de las vacaciones a la oficina? El ocio eterno sería agotador, por tanto, disfruta del placer de volver a un trabajo en el que puedes desarrollarte.

5. Potencia el sentimiento de la gratitud. Puedes despedir el verano haciendo un álbum de fotos con las imágenes más felices de esta estación. Y también, puedes abrir tu corazón a todo lo bueno que está por llegar.

6. Piensa en todo lo positivo de la vuelta a la rutina de septiembre. Las ofertas en la cartelera de teatro y de cine son más interesantes en otoño que en verano. Puedes quedar de forma más habitual con tus amigos mientras que durante el verano, las relaciones sociales también se dispersan.

7. La televisión envía mensajes de éxito fácil a partir de un nuevo tipo de fama. Por ejemplo, ser ganador de un reality. Inspírate en ejemplos de profesionales que hacen de la constancia su principal valor. Por ejemplo, Rafa Nadal que vuelve a ser el número uno.