La cocina es uno de los lugares más importantes en el hogar, especialmente ahora que se ha convertido en un espacio multifuncional en el que puedes compartir con toda la familia al mismo tiempo que preparas los alimentos. 

Para que tengas tu espacio soñado, a continuación te describiremos 3 tipos de cocina con isla que te van a enamorar, diseños que no dejan a nadie indiferente.

#1 Cocina con isla de diseño minimalista

El estilo minimalista brinda un toque muy moderno a las cocinas, principalmente porque no se emplean tantos elementos decorativos, lo que garantiza funcionalidad y eficiencia para aprovechar cada espacio. 

Generalmente, las islas en este tipo de diseños cumplen siempre una doble función, ya sea como mesa multifunción y comedor con el que se puede distribuir bien el lugar.

Los materiales que se utilizan en las cocinas de diseño minimalista son sencillos y versátiles como la madera, la cerámica e incluso algunos tipos de plástico de calidad, siempre con colores neutros como el blanco y negro que generan una sensación óptica de amplitud y confort.

#2 Cocina con isla en el centro

Este es uno de los diseños clásicos en cocinas con isla que no pasan de moda, de hecho, tiene varios puntos a favor. Para empezar, el modelo permite que se aproveche al máximo cada espacio. Además, por lo general su tamaño va desde los 90 cm hasta más de dos metros lo que permite que consigas la que mejor se adapte al espacio disponible.

En las cocinas con isla central puedes colocar placas de cocción, cualquier tipo de electrodoméstico y lavavajillas, así como adaptar algunos cajones para el almacenamiento de utensilios y así mantener tu cocina bien organizada.

#3 Cocina con isla de ruedas

Este modelo de cocina es uno de los que están marcando pauta en los últimos años por ser de los más novedosos, prácticos y por encajar muy bien en casas con poco espacio o en apartamentos de playa. 

La isla puede trasladarse de manera cómoda a otro lugar cuando no se esté utilizando, por ejemplo, si es de un tamaño reducido puede colocarse fácilmente debajo de una barra o encimera.

Para facilitar el movimiento, lo ideal es que sea de un material liviano como la madera, pero que también pueda incluir detalles en acero que le den resistencia.